Sabiduría Diaria 02.07.2019
(FOTO: LAURENCE FREEMAN, EEUU)
El sufrimiento, de donde sea que surja, tiene una otredad que aterra. Nuestra expectativa innata de que la vida y los otros nos tratarán bien - nuestro sentido de justicia - de repente parece ser muy inocente. Aún que no podamos culpar a un enemigo en particular o a un amigo falso, puede ser que culpemos a Dios. Al principio negamos admitir instintivamente lo que ha pasado y queremos regresar en el tiempo. La negación es un estado mental al que entramos y en el que podemos permanecer muchos años. Después simplemente nos podemos sentir exhaustos. Sólo el proceso de perdonar nos libera de esta derrota. De la negación nos desplazamos hacia la aceptación porque hemos aprendido a enfrentar y abrazar lo peor. Y enfrentar lo peor anclados en la verdad nos permite sacar lo mejor de nosotros.
( Meditatio Newsletter, October 2010, Laurence Freeman OSB )