Sabiduría Diaria 31.07.2018
(FOTO: LAURENCE FREEMAN, CAPADOCIA, TURQUIA) Como dijo uno de los padres del desierto: “vendrá el tiempo en que el mundo se volverá loco y la gente loca verá a una persona cuerda y dirá ‘ese está loco pues no es como nosotros.’” En un tiempo en que la verdad se hace menos y las verdaderas noticias son llamadas falsas noticias y por lo tanto sospechamos de todas las noticias, es fácil sentirnos impotentes y sin esperanza, ya que si lo dejamos libre, este sentimiento nos lleva directamente a lo que los padres del desierto llamaban acedia, un estado sin energía, una noche obscura en la cual no parece que amanecerá nunca y donde darnos por vencidos toma el lugar del desapego. Entonces ¿Por qué seguir fijándonos en las malas noticias?, ¿No sería mejor comer, beber, estar alegres, jugar en el sol y completar sólo nuestras responsabilidades inmediatas? Las razones por la que no he sucumbido a la tentación, aunque ahora obtengo mis noticias de mejores fuentes, es que en primer lugar, aún si la realidad es tal que los poderes de la irrealidad están manejando al mundo, tenemos la obligación de enfrentar esa realidad y seguir prestando atención a todo lo bueno que sigue existiendo en el mundo y de hecho en todos nosotros, aun en los peores líderes. En segundo lugar, necesitamos enfrentarnos a la verdad completa y cumplir con todas nuestras responsabilidades si es que vamos a contribuir a aquello de lo que formamos parte de manera indisoluble. Pertenecemos al mundo al igual que pertenecemos a una familia, nos guste o no. (Meditatio Newsletter, July 2018)