Sabiduría Diaria 20.05.2018
(FOTO: LAURENCE FREEMAN, EEUU)
El ágape es el hijo de la apatheia. Es la palabra más utilizada en el Nuevo Testamento y se traduce como amor. Hay otras palabras para amor – eros, filia, amistad – pero ágape es el amor de Dios, un amor que no conoce límites. El amor que ilumina a buenos y malos por igual, que es amable con el ingrato y el malvado. Este es el amor al que se refiere Jesús cuando dice que nos amemos unos a otros – de la misma forma en que Dios nos ama, con su amor infinito. Así que el hijo de la apatheia no es un éxtasis espiritual pequeño y privado como lo experimentamos al principio de nuestro viaje, ese tipo de iluminación privada que guardamos para nosotros. Y su objetivo es la efusión natural del amor de Dios dentro de nosotros hacia afuera, iluminándonos e iluminando a todos aquellos con quien nos encontramos también.
(Map of the Journey, Meditatio Series 2011 C)