Sabiduría Diaria 25.04.2018
(FOTO: LAURENCE FREEMAN, SINAI, EGIPTO) Si queremos entender lo que hacemos al repetir el mantra y cuál es el trabajo que estamos haciendo (y es importante reconocerlo como trabajo), debemos identificar, al igual que aquellos monjes en el desierto, el trabajo del mantra con la pobreza de espíritu. Recordemos a Casiano en la conferencia 10: “Cuando dices tu fórmula, tu palabra, estás renunciando a toda la riqueza de tus pensamientos e imaginación. Por lo que llegas con relativa facilidad a la primera Bienaventuranza, la pobreza de espíritu.” Esta es la pobreza a la que llegamos a través de una renuncia voluntaria de nuestra propia riqueza. Por eso, las Bienventuranzas son más bien una expresión de cómo vemos, cómo encontramos significado, cómo profundizamos en el significado de la vida entendiendo lo que está sucediendo, es decir un comprender la presencia de Dios en cada instante de la vida. Es una sabiduría. (Map of the Journey, Meditatio Series 2011 C)