Sabiduría Diaria 11.04.2018
FOTO: LAURENCE FREEMAN, BERE ISLAND, IRLANDA) Nos sentamos a meditar y comenzamos a decir nuestro mantra. Inmediatamente recordamos que debíamos haber llevado nuestro automóvil a servicio. ¿Y la próxima cita es a las tres o las cuatro? ¿Necesito ir a la lavandería hoy o era mañana? Qué bonito vestido traía aquella persona en la cena de la otra noche. Momento, debería estar diciendo el mantra. ¿Lo estaré diciendo bien?, ¿Sirve de algo todo esto?, ¿Cuándo llegará la iluminación?, ¿Dónde está Dios?, ¿Está aquí realmente?, ¿Estaré perdiendo mi tiempo?, ¿habrá una mejor manera de hacerlo? Debo decidir si tomar el vuelo a Boston por la mañana o por la tarde. ¿Y el mantra? Debo regresar al mantra. ¿Cuánto más va a durar esto?, ¿Puse bien la alarma? Voy a ver rápidamente. Ah, una taza de café me caería muy bien. Será mejor cuando me vaya de retiro. ¿Me quedaré más tiempo? Entonces podría meditar bien. ¿Me iré toda la semana? ¿O sólo unos días? ¿Qué me recomendaría John Main?, ¿O el Gita? El Bhagavad Gita es maravilloso. La mortalidad es una gran maestra. Repite el mantra. Estás desperdiciando tiempo valioso. ¿Porqué me duele el costado después de comer? Mi papa murió de cancer. Mañana empiezo una dieta baja en calorías. Ahora hay nuevos productos en el supermercado para eso. Ah, debo de obtener la nueva tarjeta de crédito. Tantas cosas por recordar. Jesús dijo que solo una cosa es necesaria. ¿Cuál será? Ya debe estar por sonar la alarma. Voy a decir el mantra de aquí a que suene. Pero olvidé llamar a…Y así continuamos. (The Goal of Life, Meditatio Series 2005 B)