Sabiduria Diaria 17.12.2017
(FOTO: LAURENCE FREEMAN, INGLATERRA)
Toda separación causa dolor, pero al mismo tiempo nos libera. Cuando un niño se separa de sus padres y se va de casa, es muy doloroso. Cuando los padres lo llevan a la universidad y lo dejan, saben que han perdido al niño en cierta forma para siempre. Al mismo tiempo, sin embargo, están felices y la relación continúa por supuesto, pues el niño regresa a casa. Pero esa separación es necesaria para una buena relación, de la misma manera que el desapego es necesario en las nuevas relaciones que vamos formando, pues ahora tenemos un sentido de nuestro yo, una percepción de quiénes somos. Todavía debemos ser cuidadosos de no caer en los patrones infantiles de apego – casarnos con nuestro papá o mamá – para tratar de crear esa seguridad pre-natal de nuevo. Esto es la psicología humana, este es el yo que estamos buscando perder, es el apego a las manifestaciones temporales o transicionales de nuestra identidad.
(Finding Oneself 1 by Laurence Freeman, Meditatio Series 2017C)