Sabiduría Diaria 08.12.2017
(FOTO: LAURENCE FREEMAN)
El querer ser el centro de todo, es una gran ilusión - la ilusión de Lucifer de querer ser como Dios. Sólo Dios no tiene límites; sólo Dios es el centro de todo. Dios es aquel cuyo centro está en todas partes y cuya circunferencia no está en ninguna parte. Pero si pensamos así de nosotros mismos o nos sentimos así, nos estamos engañando y somos peligrosos. Es un estado patológico, una enfermedad mental. Podrías terminar en una sala psiquiátrica, o siendo un asesino en serie o un asesino en masa, o podrías terminar como un dictador de una sociedad. Necesitamos límites para ir más allá de estos hacia lo ilimitado. El propósito de encontrarse a uno mismo, es moverse de un mundo en el que somos el centro de la realidad, pensamos que somos el centro de la realidad, al mundo real, que es Dios, que es verdaderamente ilimitado. (Finding Oneself 1 by Laurence Freeman, Meditatio Series 2017C )