Sabiduría Diaria 14.10.2017
(FOTO: LAURENCE FREEMAN, BERE ISLAND, IRLANDA)
Cuando le des al necesitado, no dejes que tu mano izquierda sepa lo que hace la derecha, dice Jesús. Darle al necesitado merece mérito. Es un acto producido por nuestra mano derecha. Pero el lado izquierdo, el lado contemplativo, no está interesado en el mérito de la acción. El rey del relato del Juicio Final recompensa a aquellos que no estaban conscientes del significado completeo de lo que estaban haciendo. Estamos llamados, pues, a una especie de segunda inocencia. La primera inocencia era de verdad inocente, libre de experiencia y operando solamente basada en confianza e intuición. Muchas veces nos llevó a tener destellos y percepciones de gran sabiduría. Pero no era adecuada para los retos mayores y las pérdidas que llegan con la madurez. Cuando dejamos el Eden y perdimos esa inocencia primaria de la infancia, caminamos mucho tiempo en el yermo, aislados y escépticos. Rechazamos lo que parecían las promesas infantiles de la religion que eran después vistas a la luz del fracaso moral de los representantes oficiales. Buscábamos una religion libre de religiosidad, una espiritualidad sin doctrina. (A Letter from Laurence Freeman March 2013 )