Sabiduría Diaria 24.05.2017
(FOTO: LAURENCE FREEMAN, ALEMANIA)
El enemigo de la verdadera religión es el perfeccionismo. Y sin embargo, todas las religiones, tal vez las 230 de ellas, construyen reglas y prácticas externas que pretenden ser la prueba absoluta de la perfección. Puede parecer más simple así. San Pablo fue a la vez víctima y perpetrador de este tipo de falsa religión hasta que las fuerzas de represión necesarias para mantener sus sentimientos de superioridad religiosa explotaron. Y en ese momento una intuición redentora de gracia y compasión tomó el lugar del frío legalismo que lo controlaba hasta entonces. El perfeccionismo bloquea la práctica espiritual a niveles más profundos, donde tiene lugar la transformación, y mantiene las estructuras religiosas del poder en oposición al trabajo del Espíritu Santo.
(Meditatio Newsletter 2009/04, Laurence Freeman)