Sabiduría Diaria 15.12.2016
(FOTO: LAURENCE FREEMAN, BRASIL)
Nuestros periodos diarios de oración equivalen al arte del navegante. Así que muchas veces, nos distraemos con algo que nos gusta o con algún trabajo y descubrimos, después de que sucedió, que hemos perdido el curso. Entonces tenemos un trabajo real por hacer, para recentrarnos y recuperar el tiempo perdido. Es mejor, notamos, el trabajo regular de un día (dos períodos de meditación bastan) que estar corrigiendo diversions o desviaciones mayores en nuestro curso, jornada o camino. La disciplina de meditar dos veces al día puede verse como el mínimo necesario para realizar y consolidar un sentido de equilibrio dinámico en el centro siempre móvil de nuestra vida, sin embargo es un mínimo efectivo.
(Christian Meditation Newsletter, June 2010 Laurence Freeman OSB)