Sabiduría Diaria 10.12.2016
(FOTO: LAURENCE FREEMAN, MEXICO)
Cuando nos sentimos perdidos, confundidos o cuando estamos penando, buscamos puntos de referencia que nos puedan servir como centros de nuevo – relaciones o actividades que nos estabilicen. Eso es posiblemente la razón de que existan lugares sagrados. El ‘templo’ siempre fue visto como un centro del mundo, con el altar al centro simbolizando el corazón o centro de la consciencia. En la antigüedad el gran ‘templum’ era el mismo cielo, pero en la tierra necesitamos centros físicos también, como santuarios, iglesias, mezquitas o monasterios. Científicamente el centro es un concepto invaluable. El centro de masa es el lugar donde se concentra la masa en un sistema. Un cuerpo rígido tiene un centro fijo. Pero una entidad más dinámica con una distribución diferente de masa – como el sistema solar, la iglesia o el cuerpo místico de Cristo – tiene un centro de masa que es un punto que puede no estar identificado con una masa particular que agrupe al sistema. Así, Cristo es el centro de la iglesia, pero no pertenece exclusivamente a una institución o denominación.
(Christian Meditation Newsletter, June 2010 Laurence Freeman OSB)